Gabinete esquizoanalítico
¿Estás harte de la psicología? Nosotres sí.
Conexiones deseantes contra el imperio del yo
El esquizoanálisis es una práctica militante surgida en el contexto del psicoanálisis institucional y la revolución de mayo del 68 en Francia, teniendo como referentes teóricos las obras de Gilles Deleuze y Félix Guattari. Esta práctica no pretende situarse al nivel del psicoanálisis y la psicoterapia, sino que se hace siempre desde fuera del campo psicoterapéutico y psiquiátrico, en los márgenes de las instituciones, por aquí y por allá. Se trata de trazar una cartografía de los procesos que nos atraviesan y constituyen para tratar de encontrar fugas a través de la experimentación. No se propone cambiar nada necesariamente, tampoco se propone una reconstrucción del yo, sino entender cómo funcionan las conexiones y las dinámicas sociales en las que nos sumergimos. Elude el tratamiento individualista del sujeto y lo comprende no como dado a priori, sino como producto de ensamblajes colectivos de enunciación. No hay malestares que no impliquen ya una colectividad. No hay enfermedades, hay dispositivos.
Desde esta perspectiva, proponemos un Gabinete esquizoanalítico como lugar de encuentro experimental, colectivo y nómada. Partiendo de una amplia base teórica (donde la teoría es una praxis de pensamiento), queremos producir una serie de relaciones experimentales en búsqueda de nuevos modos de acompañamiento colectivo que desinvistan simbólicamente la relación médico-paciente de la psiquiatría, la psicoterapia y el psicoanálisis, fomentando la horizontalidad y la transversalidad. Todo esto bajo una serie de premisas:
- Cuestionamiento de la relación monetaria: proponemos una tarifa acorde a los medios y nunca fija, incluso gratuita o no mediada por el dinero, para no crear una relación jerárquica analista-analizado. Pensamos el tiempo y la productividad de los encuentros como variables a tener en cuenta.
- Nomadización de los encuentros: evitar que se produzcan siempre en el mismo lugar. No más despachos, no más divanes. Poner en práctica movimientos de desterritorialización. Se nos ocurren: espacios okupados, parques, paseos, casas (propias o ajenas que se nos cedan) o eventualmente online.
- Esquizoanálisis individuales o de grupo. Experimentar con encuentros grupales donde se establezca una comunicación que no sea dual, sino que pueda incluir a varios de nosotres (en calidad de esquizoanalistas o facilitadores) y/o a más personas que quieran poner en práctica esta experimentación.
- No se trata necesariamente de cambiar o de sanar heridas ni traumas. No hay un yo herido sobre el que intervenir. Creemos que estas cosas podrán producirse eventualmente en los procesos de experimentación. La cuestión es cartografiar nuestras conexiones, nuestros procesos y ensamblajes, para poder intervenir en ellos, que no queden meramente capturados por dispositivos que no entendemos ni controlamos.
- Creemos que muchos de los problemas capturados por los dispositivos psiquiátricos y psicoterapéuticos y clasificados como enfermedades o trastornos son meramente problemas de expresión. En cuanto caen bajo estas categorías que definen lo normal y lo patológico, se crea al sujeto enfermo. Nosotres queremos liberar las singularidades, darles los medios de su propia expresión, sin producir juicios ni interpretaciones expertas en función de los saberes y poderes hegemónicos de la ciencia capitalista.
- Queremos que a través de este proceso de escucha, conocimiento y expresión lo que se produzca sea toda una explosión de las potencialidades y del campo de posibles. Abrirse al mundo, al cosmos, y hacer que el cuerpo conozca todas sus potencias.
¿Cómo?
Queremos poder experimentar, intervenir, abrirnos a la colectividad y crear nuevos modos de (de)subjetivación. Si algo de esto te resuena, si te genera cualquier tipo de interés, si tienes preguntas, dudas, sugerencias o propuestas, o si te interesa poner en marcha un proceso esquizoanalítico, individual o grupal, escríbenos aquí:
📧 sz2000@tuta.io
o aquí:
📧 usd2010@tuta.io